sábado, 24 de agosto de 2013



Vandekames 2013

2013 Vandellos 3 de agosto

Después de haberme tomado unas merecidas vacaciones tanto en lo físico como en lo mental, tenía pendiente explicaros un poco mi última carrera que fue hace ya casi un mes. No sé si me acordare de todo, pero después de haberme enterado que hay gente que ni imaginaba que lee estas líneas pues al lio, que no os puedo defraudar.
Después de haber estado mirando a los señores del tiempo los días previos a la carrera y que anunciaban para esta fecha una ola de calor con temperaturas superiores a los 35º a la sombra me desplace hacia Gandesa donde me recogieron Joaquín y Xavier de Batea. Lo primero que comentamos es el tiempo, está muy nublado y amenaza lluvia. Ole los huevos de los meteorólogos!!!.
Llegamos a Vandellos y aparcamos cerca de la salida. Nos preparamos, aunque yo casi no se qué ropa ponerme (hoy llevo el numero 5131 ¿? Ni que fuera esto el maratón de nueva york), y entre una cosa y otra pierdo el xip de control, aunque después de mucho buscar por el coche de Joaquín resulta que lo llevo en la goma del pantalón.
Llega la hora que esta vez es a las 5 de la tarde y dan la salida.

 Hoy como ya les he dicho a mis compis yo me lo voy a tomar con mucha calma. Y así es, en el tramo del pueblo y la senda hasta la primera subida me pasa un montón de gente y eso que habíamos salido de mitad para delante. En este primer tramo sale el sol y el calor es sofocante subiendo por senda como una interminable serpiente multicolor. Xavier va delante y lo voy viendo y Joaquín va por detrás y no lo localizo. Emprendo la primera bajada y como ya me voy animando, se ha vuelto a nublar y la gente va con mucha precaución, decido lanzarme a remontar puestos, y así voy haciendo hasta que llego a Masboquera donde pasamos por debajo de la carretera que va a la playa, tomamos un refrigerio y emprendemos la segunda y quizás mas dura subida del día. Pasamos por una especie de pueblo abandonado donde pone más de Castello donde hay otro avituallamiento.

A pesar de que no hace sol y que la temperatura está por debajo de los 30º voy sudando como un cerdo, sudando como nunca antes había sudado tanto, pienso que voy a explotar deshidratado si sigo así. Llevo un cinturón con botellero y voy bebiendo pero no mucho. Pero entonces me doy cuenta de que no soy el único que suda, que la gente va chorreando con las piernas llenas de barro por el polvo que se pega en ellas.
En la parte más alta de la carrera las nubes nos impiden ver bien y por allí aparece Xavier que ha tenido que hacer 2 paradas técnicas “a mandar un fax”. El va más fuerte y me vuelvo a quedar detrás. Tras una larga bajada llegamos a la última subida del día en la que se ve Vandellos pero en qué vamos en sentido contrario.

 Voy cogiendo a gente que va fundida, yo voy aceptablemente bien con lo que al ir pasando me voy animando. Empiezo a coger a gente que hacen la carrera corta que amablemente me dejan pasar. Emprendo el ultimo descenso en el que me lo tomo con mucha calma y  que me pasa uno que iba fundido antes y que se había reviscolado. Tras cruzar todo el pueblo otra vez llego a meta con un tiempo de: 3h 49min 30 seg en la posición 47 para los aproximadamente 25km de hoy. Terminamos 137.
Xavier ya había llegado y esperamos un poco a que llegue Joaquín y vamos a ducharnos.
La logística de esta carrera es espectacular, escenario, música, una gran fideua, un chubasquero guapo que nos dan por participar. Se nota que es un sitio con perras.


Son casi las 11 de la noche y hay que irse para casa.
Espero no haberos defraudado con esta última crónica hecha un poco a destiempo. Prometo hacerlo mejor a partir de septiembre en mi #buscandoelputolimite

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